Estrella fugaz.

Al ver cosas así me siento bien. Siento ese pequeño calorcito en mí, no sé bien dónde... diciéndome 'sí, algo estás haciendo bien'. Y luego me pregunto, ¿como tuve la suerte de encontrarme con gente así? Con gente tan maravillosa como lo son algunos... 
'Creo que eres fantástica, pero eres humana y no eres perfecta. Aún así, te quiero' Esa frase me dejó helada, pensando... soy humana, no soy perfecta. Entonces ¿por qué siempre trataba de llegar a la perfección? Intentaba siempre agradar a los demás, ¿con qué fin? El querer ser aceptada por esta sociedad, intentado reprimir cada mal suceso de mi vida durante la infancia. ¿Lo logré? ¡Claro! Era de las personas más importantes dentro de mi entorno, le agradaba a la gente y eso me agradaba a mí. Me encantaba ser el centro de atención por cualquier motivo, siempre intentaba sobresalir, y claro, sobre-exigirme siempre. ¿Qué cambió? ¿Por qué ya no intento lograr la perfección siempre?  Debe ser porque en un momento, la alcancé. Al menos desde el punto que a mí me interesaba la alcancé. Ser primer lugar, alumna destacada, licenciada con honores, recibir diplomas, recibir los aplausos de esa gente que estuve conociendo por muchos años, entregar la bandera del colegio, y finalizar mi enseñanza media con el discurso de fin de año. Recuerdo claramente que el discurso comenzaba citando una frase de Oliver Wendell Homes, y decía: '' No importa donde estemos, sino hacia donde avanzamos. Para arribar a puerto seguro a veces navegamos con el viento a favor y a veces en contra, pero la cuestión es navegar, no derivar sin rumbo ni permanecer anclados " (Sí, la postié en un par de entradas más atrás). Y más adelante hablé sobre la felicidad, sobre la frase que dijo aquella anciana que nunca logré conocer, que dijo 'cuando eres feliz, permites a los otros ser felices también'. Ese día fue uno de los más felices de mi vida, aunque en ese entonces no tenía fijo el rumbo por el cual seguir. De las mejores decisiones que he tomado en mi vida, ha sido esta, la de estudiar Psicología en la Universidad San Sebastian. Hay momentos, cuando vengo de vuelta a mi casa y pienso el típico ¿qué hubiera pasado si...? Y pensé, ' ¿qué hubiera pasado si al momento de irme a retractar a la USS hubiese dicho que no?, ¿qué hubiese pasado, si en el momento que el hombre vestido con chaqueta azul me preguntó definitivamente si prefería quedarme o irme a la otra Universidad, le hubiese dicho, ''no, he venido a retractarme y así lo hare''? Todo, absolutamente todo hubiera sido distinto. Y no, no me arrepiento de haber tomado esa decisión.  Gracias a aquello he conocido a gente fantástica, con la que he reído a carcajadas, con la que he ido tomando confianza, con la que he ido formando una hermosa amistad, con la que cada día voy conociendo un poquito más y reafirmo mi postura del no arrepentirme. Éso era algo tan común en mí antes, el decir 'demonios, me arrepiento. Debí haber echo...(tal cosa)'  No me arrepiento, no me arrepiento, no me arrepiento. Es hermoso pensar así. Creo que he ido creciendo, me he ido conociendo más a través de ellos (L)
No sería necesario nombrarlos, al menos los que tienen colores asignados ya saben quiénes son. Pero hay gente que se suma a la lista, que me encantaría conocer y quién sabe, llevar una linda amistad más tarde. 
Sin un orden específico: DinamarcaValentina, Nacho Vega, LucíaLú, Esteban, Ivancín Uhaha, Sebastian, Germain,  Doll, Reinaldo, Favorita, Danae, Ceci, Maximiliano, Pablo, Didier, y así, muchísima gente másh ♥
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 Constantemente estaba en una lucha contra un 'alguien' que me opacaba. Quería cortar de raíz ese árbol que le daba sombra a mi vida, hasta que me di cuenta, era yo misma. Era  ese temor de decir lo que sentía, de contar lo que me pasaba, de expresarme sin temor. Era ese rencor que he sentido y sigo sintiendo aún por ese hombre repugnante, el miedo a que alguien descubriese mi secreto más obscuro... Pero ya nada importa. Los temores se han espantado cuando conocí la luz, el rencor he tratado de apaciguarlo, y que mi secreto se sepa, me vale poco. 
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"El mundo dice una cosa, y tú dices otra". Es bueno tener el chance de elegir qué es lo que quieres y no decir. No temas a la mirada extrañada del de tu lado, no temas al qué dirán, que no te importe lo que la gente piense de ti. Preocúpate por tu felicidad, por vivir tu propia vida, que para eso estás aquí.


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No puedo creer que es verdad, que tanta felicidad haya llegado hasta mí, por eso no puedo así quitar mis ojos de ti... Te quiero mucho, y bien compréndelo, te quiero mucho...